El amor moderno

Y la super semana estresante se fue a la chucha. Y los profes nos dicen que no nos preocupemos de nada porque tenemos que luchar hasta el final por una educación digna. Y yo en la asamblea me di cuenta que el mundo no se puede cambiar haciendo unos panfletos. Pero de que se pueden hacer cosas, si que se puede.

Entonces me levanté en la mañana y veía en las noticias que la cosa iba a estar pulenta, salí de mi casa y como siempre me congelé esperando a la jose en la esquina de los laureles con volcán osorno, caminamos dos cuadras para encontrarnos con el chris, nos reímos de los chistes de siempre y a la micro.En Paicavi aparece la caro y no sé, sentí que estaba en un recreo del 2004 después de un ensayo psu buscando al john para que nos deje irnos a la casa.

Ocho veinte y entro a la sala. Oliva hablaba del reportaje que tenemos que hacer, y yo me acuerdo que en la asamblea se habia acordado que la carrera estaba en paro y según tengo entendido paro significa no ir a clases.

En fin

Después de muchas cosas, entre ellas cafeses y cigarroseses, decido partir. En el Santa Isabel me despido del chino y jano pero me encuentro con la pachi que me ofrece la empanada de manzana que me debía, entonces con carletos vamos a su departamento y mientras ella calienta su lasagna nosotros comemos una excentricidad chilota que mala no estaba. A eso de las 2 y media nos vamos rumbo a la galeria caracol porque mi plan era simplemente comprar cuerdas para la guitarra.Ver la película de Oliva, esperar a hablar con Oblitas, buscar la fotocopia de política, ir a la asamblea de las doce y pasearme por el santa isabel eran meros trámites que retrasaban mi objetivo del día; cumplir el sueño de tener cuerdas nuevas después de 6 años sin cambiarlas.
A la salida carletos se va a Anibal Pinto y como yo tomo micro en San Martin me despedí y le desee buena suerte en la capitale. Es un buen cabro ese carlos, me salvó del reggaeton el viernes y algún día me dará un tour por collado.

En la micro de vuelta empecé a tener esos pensamientos cortos que se aparecían dependiendo de la canción que escuchaba. A las tres treinta de la tarde no hay muy buena música en la radio y lo que tengo grabado en el reproductor lo vengo escuchando hace dos semanas, pero eso da lo mismo cuando lo que suena es realmente bueno. El asunto es que canción de todo va mala de le mans sería la preferida si empezara desde el minuto 3, y cherry chapstick de yo la tengo definitivamente tengo que sacarla en guitarra.
Caché que tenía tres días libres y no podía desperdiciarlos como lo hice con mi verano eneral febreral. Así que intenté planear que cosas he querido hacer todo este tiempo y no he podido.

Como por ejemplo:
Llevantarme tarde, bajar y ordenar algunas músicas, sacar el computador de mi pieza, por lo mismo inflar el puff y poner el equipo en su lugar, pegar los recortes de revistas a los cuadernos, comprar audifonos 3b, ver los videos del daily news, ir a la viva a leer revistas, ir al cine a ver match point, mirar si hay algo decente en la ropa americana, sacar fotos para indie o simplemente pedirle algunas películas al pedrito o a la andrea, comprar helado y verlas en mi casa. Sola, como siempre.
El problema es que apuesto que no haré nada de eso, y que mañana iré a la U a ver que onda y me quedaré ahí todo el día y después llegaré a mi casa a comer y dormir para el jueves pensar en levantarme. Pero sólo pensarlo.

Call me morbid, call me pale